El regreso de Un Poyo Rojo a la Calle Corrientes es una celebración de la creatividad y el talento argentino en su máxima expresión. Tras 15 años de éxitos ininterrumpidos, con más de 1000 funciones en 30 países, esta obra de teatro físico se presenta en el Teatro Metropolitan por solo siete funciones desde el 14 de enero.

Nacida en el circuito off en 2008, Un Poyo Rojo se consolidó como un fenómeno escénico internacional. Lo que comenzó como un número de varieté ideado por Nicolás Poggi y Luciano Rosso, inspirado en la riña de gallos y el cortejo de aves, evolucionó hacia un espectáculo que cruza danza, teatro, acrobacia y humor.

Un lenguaje corporal que trasciende las palabras
Desde el inicio, el público se encuentra inmerso en una montaña rusa de emociones que abarca desde la risa desbordante hasta la admiración absoluta por las proezas físicas de los intérpretes. La competitividad, el deseo, los juegos de poder y la pasión se manifiestan tanto en pequeños gestos cargados de ironía como en acrobacias espectaculares.

Luciano Rosso y Nicolás Poggi (en esta oportunidad reemplazado por Alfonso Barón) entregan interpretaciones magnéticas que combinan la gracia de comediantes consumados con la destreza de bailarines y acróbatas de élite. Su complicidad escénica hipnotiza al espectador, llevándolo a un territorio donde el lenguaje corporal revela aquello que las palabras no alcanzan a expresar.

Un Poyo Rojo mezcla comicidad y crítica social e invita a reflexionar sobre nuestra propia humanidad mientras nos reímos de nuestras contradicciones. El equilibrio entre lo naíf y lo provocador, entre lo kitch y lo sofisticado, convierte cada función en una experiencia irrepetible, con variaciones que enriquecen el espectáculo función tras función.

Si tuviera que destacar una parte sin duda seria el zapping radial EN VIVO que hacen y a su vez improvisan corporalmente lo que escuchan (unico e irrepetible en cada funcion en cada lugar que ponen el aparato y se enciende)

La obra celebra las infinitas posibilidades del cuerpo humano, tanto físicas como espirituales, en una puesta que desafía los límites del teatro contemporáneo. Con un diseño minimalista pero contundente, la propuesta logra generar climas donde todo parece posible.

UN POYO ROJO trasciende las palabras.

Las 7 funciones en el Metropolitan son una oportunidad imperdible de disfrutar de una de las obras más originales y memorables del teatro físico contemporáneo.