Lo primero que te quiero decir es….NO COMPARES! La pelicula de 1989 interpretada por Michael Douglas y Kathleen Turner NO TIENE COMPARACION! Dicho esto…sigo . Los Roses fluye cuando se apoya en el duelo actoral de Olivia Colman y Benedict Cumberbatch: dos intérpretes afilados, con timing quirúrgico, que hacen de cada cruce una pequeña batalla de ingenio.

Los Roses son Theo e Ivy una pareja que, a pesar de parecer perfecta con su exitoso matrimonio, hijos y carreras, se enfrenta a un polvorín de resentimiento, competencia y celos. La relación se desmorona cuando la carrera de Theo decae y la de Ivy despega, desencadenando una guerra doméstica llena de rencores y el deseo de destruirse mutuamente

Jay Roach dirige con pulso clásico y el guion de Tony McNamara arma réplicas veloces, sarcásticas e inteligentes que sostienen la película incluso cuando la trama se toma respiros. En los alrededores, Andy Samberg, Kate McKinnon y Allison Janney suman textura —con chispazos de comedia— sin robar foco en la pareja central.

El corazón del film está en esos diálogos punzantes, el ida y vuelta de réplicas rápidas, p, dobles intenciones que se disfrutan por el vértigo verbal y por cómo Colman y Cumberbatch van tensando (y aflojando) la cuerda emocional. Hay escenas de mesa y terapia donde el sarcasmo es para pochoclo y gaseosa, de lo mejor del conjunto.

Si el medio tramo pierde algo de filo, el cierre repunta con decisión: la disputa dialéctica escala y encuentra un clímax físico que le devuelve nervio y riesgo al relato, redondeando una experiencia entretenida para quienes buscan humor con colmillo y actuaciones en estado de gracia